martes, 23 de enero de 2007

COLOMBIA: Clases de religión seguirán igual

Clases de religión seguirán igual, según decreto del Ministerio de Educación

Pero a pesar de las largas discusiones entre el Gobierno y las confesiones más representativas, el texto final no trae mayores cambios.
Eso aseguran las asociaciones de padres de familia y de colegios públicos, privados y religiosos. El único punto desconocido hasta para la ministra de Educación, Cecilia Vélez, es el certificado de idoneidad que necesitarán los profesores de la materia.
Vélez respondió algunas de las preguntas que se hacen colegios y padres de familia sobre los alcances del Decreto 4500.
¿Se puede perder la materia?
Sí. La nota de la clase será tenida en cuenta en "los informes periódicos de evaluación y el informe general del desempeño de los estudiantes y será tenida en cuenta para su promoción", según dice el Decreto. Esto implica que aún las actividades alternativas para los que rehúsen tomarla, como hacer trabajos en la biblioteca, debérán evaluarse. Esto, porque la Ley General de Educación establece que la religión es un área tan fundamental como las matemáticas y el español.
¿Qué va a pasar con los estudiantes que decidan no tomar la clase porque su familia es de otra confesión?
En pocas palabras, la respuesta es: seguirá pasando lo que hasta ahora. Esto, porque el Ministerio no definió ni las horas que deberán asignarse a la asignatura ni lo que se hará en caso de que un alumno no tome la clase.
"Por ahora simplemente lo mandan a la biblioteca castigado o, en su defecto, le dicen venga y barra el colegio o hágale aseo a los baños. Eso debe aclararlo el Ministerio", dice Carlos Ballesteros, presidente de la Asociación Nacional de Padres de Familia. Los privados están de acuerdo.
¿Historia de las religiones o repeticion de los Mandamientos?
La norma deja abiertas dos opciones: que el colegio aproveche el espacio para enseñar historia de las creencias religiosas, ética o principios morales. "Esa es la tendencia", dice Martha Castillo, presidenta de la Asociación de Colegios Privados. La segunda, que se hable de un credo en particular, siempre que los alumnos no creyentes no sean obligados a estar presentes y no se haga proselitismo.
¿Quién garantiza que no se haga proselitismo?
"Es deber del padre de familia. Si el profesor se excede, puede poner la queja en la Secretaría de Educación", dice la Ministra. Eso parecen tenerlo claro hasta los colegios católicos: "No hablamos de ritos ni ni tocamos la fe misma. Hacerlo sería proselitismo", dice la hermana Blanca Castro, de la asociación católica.
¿Por qué se necesita permiso de un credo para dar la clase?
Según el decreto, es necesario que el profesor de religión tenga el permiso de una iglesia (católica, evangélica u otra). "Eso es absurdo", dicen las asociaciones de colegios y de padres. La respuesta de la ministra de Educación: "No sabía que esto había quedado incluido". De hecho, funcionarios del Ministerio dicen que se incluyó solo porque estaba en la Ley 133. Lo que recomienda este ente es pasar esto por alto. "Pero si un padre se queja porque el maestro no tiene el permiso, hay que cumplir la Ley", dice Vélez.

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